martes, 30 de octubre de 2007

El Auxiliar Docente

CAPÍTULO II:

Características de la Función del Auxiliar Docente

Según esta última definición “el Auxiliar Docente” posibilita –actuando como nexo- la interacción de los miembros de la comunidad educativa, permitiendo “encuentros educativos”, que son los siguientes:
*
PROFESOR<----------------------------->DIRECTOR 1
¡.................................................................................-.¡
¡<--------------AUXILIAR DOCENTE---------------->¡
¡....................................................................................¡
¡----------------AUXILIAR DOCENTE-----------------¡
ALUMNO 3<----------------------------->FAMILIA 4



1.- El Auxiliar Docente interactúa con el Profesor y se establece una estrecha relación, dado que estamos a su servicio para todo aquello que necesiten para el desarrollo normal de sus cátedras, como ser:

  • Informamos sobre asistencia e inasistencia de alumnos.


  • Preparamos y controlamos los libros de aula.


  • Entregamos los cursos en condiciones óptimas para el dictado de clase.


  • Entregamos el material didáctico solicitado por el profesor.


  • Solicitamos a los padres que se acerquen a conversar con el profesor cuando ellos lo solicitan y si advertimos algún problema, y por algún percance o falta de tiempo, y éstos no lo solicitan, nos acercamos a hablar con él o los alumnos y si la situación lo requiere lo citamos
    nosotros.

En esta asistencia continua y constante ante todo tipo de requerimientos ayudamos y complementamos la labor del profesor, en cuanto a la formación integral del alumno. Dado que nos ocupamos de enseñarle hábitos de respeto, responsabilidad, puntualidad, colaboración, cumplimiento del orden, etc.


2.- Auxiliar Docente con la Dirección, la asistencia y la comunicación ( fluido permanente de información, consultas, de sugerencias, de confidencias y resolución personificada de problemas).

Un ejemplo concreto del trabajo en conjunto, entre Director, Profesor y Auxiliar Docente podría ser el siguiente: se presenta una situación en la que en los alrededores del establecimiento se ha notado la presencia de personas extrañas y se presume que puedan ser vendedores de drogas.

Generalmente esta percepción la realiza aquel integrante de la Comunidad Educativa que cumple una función más activa y dinámica en la Institución.

Una vez advertido el director de esta situación, normalmente, las medidas a tomar son: reuniones conjuntas a fin de tomar los recaudos pertinentes.

A partir de ese momento el Auxiliar Docente comienza a investigar y/o alertar a sus alumnos. Muchos de nosotros, como la experiencia nos dicta, recurrimos para esta tarea a lo aprendido en numerosos cursos de prevención de la adicción a la droga.

Es muy posible que estas personas lleguen a eludir algunos controles, pero no podrán hacerlo con el Auxiliar Docente, porque será el primero en distinguir algún cambio de conducta de su alumno.

“Hasta aquí podemos afirmar que tanto el Director como los Profesores, en su conjunto, reciben la información real y concreta, de todos y cada uno de los alumnos, a través del Auxiliar Docente”.

3.- Auxiliares Docentes y Alumnos, es válido afirmar que somos quienes estamos íntimamente relacionados con los mismos, dado que pasamos frente a ellos la mayor cantidad de horas escolares que cualquier otro integrante de la institución y que además estamos a su disposición desde el mismo instante en que ingresan al establecimiento y hasta el último segundo en el que permanecen en él. Y no solo de lunes a viernes, sino también en los días de actos, fiestas, viajes, actividades extra escolares, etc.

Los alumnos llegan a confiar tanto en los Auxiliares Docentes que le hacen partícipe de sus vivencias, experiencias, problemas particulares, familiares, escolares, etc.

Cuando algún alumno necesita algo, sea lo que fuese, recurre a sus Auxiliares Docentes porque tiene la certeza de que no lo abandonará y lo protegerá y siempre estará cuando lo busque, amén de saber dónde encontrarlo en cada minuto del día escolar.

Además, en las horas libres, no están abandonados y dando vuelta por el establecimiento, o en ocasiones fuera de él, sin que nadie sepa dónde están o qué les está ocurriendo.


4.- La relación particular de los Auxiliares Docentes con sus alumnos, se extiende a los padres de los mismos, dado que ante cualquier inconveniente que se les presenta o información que necesitan, se dirigen en primer lugar y con toda confianza a nosotros

Esto es así, porque son plenamente conscientes de que somos quienes recepcionan todas las inquietudes de sus hijos, y que pueden contar con nosotros para darles solución a problemas que, a veces ellos no saben cómo enfrentar, porque en una gran cantidad de ocasiones, sus hijos hablan más con nosotros que con ellos, dado que en la mayoría de los casos y por razones de trabajo, no pueden estar tantas horas cerca de los chicos como en realidad quisieran, ni como las que nosotros estamos.

En síntesis:

Los Auxiliares Docentes: actuamos como puente de interacción con la Comunidad Educativa porque practicamos públicamente un oficio, con condición y actitud, utilizando una doctrina metódicamente formada y ordenada, basándonos en el conocimiento cierto de las cosas por sus principios y causas, enseñando así un conjunto de reglas o preceptos para conseguir que nuestros alumnos hagan bien las cosas. A fin de que al finalizar sus estudios se encuentren humanamente capacitados para enfrentar la realidad existente fuera de la escuela. Y esto mismo logra que los mencionados encuentros educativos se conviertan en realidad.

Y hay algo concreto que sabemos que nunca cambiará a pesar del cambio de autoridades directivas, la relación del Auxiliar Docente con el alumno. Inclusive si la división de un curso cambia de Auxiliar Docente, el nuevo va ha llegar a tener, una estrecha relación o casi similar, que el anterior. Porque el trabajo mismo del Auxiliar Docente con el alumno funciona siempre de la misma manera.